En la visita al Colegio “San José” de Costa Rica, me comprometí a llevar al Papa Francisco, café de Costa Rica, dado que ha expresado que le gusta mucho este café.
Hace unos días le dejé este encargo en el Vaticano con una carta explicando la procedencia del mismo. El día 29 de mayo encontré en el buzón del correo electrónico la respuesta a dicha entrega. Creo es digna de darla a conocer, pues detrás de ello, está la cercanía del Papa Francisco. Con este gesto, una vez más, siento la forma de encarnar el evangelio, siendo cercano a todos y las grandes preocupaciones de la Iglesia, no le impide llegar a lo más simple y sencillo. ¡¡Gracias Papa Francisco!! realmente muestras el rostro de Dios humano y cercano. El Señor te siga bendiciendo y te conceda sus dones para continuar en la misión de ser don para los demás.
